Ciudad de México. — Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) en la Cámara de Diputados, cerró filas con el Gobierno Federal tras la detención de Edgar Rodríguez Ortiz, alias “El Limones”. El legislador zacatecano calificó de acertada la labor del Gabinete de Seguridad y del Ministerio Público para desarticular a este objetivo prioritario, identificado como cabecilla de “Los Cabrera”, célula armada afín a la facción de “El Mayo” Zambada en el Cártel de Sinaloa.
Durante una conferencia de prensa en el recinto legislativo de San Lázaro, el coordinador de la bancada morenista destacó la importancia de que las instituciones de justicia operen sin distingos. Monreal subrayó que la captura de Rodríguez Ortiz, quien según informes de inteligencia federal operaba en el segundo nivel de mando de la organización criminal, es una muestra clara de que la estrategia contra la impunidad va en serio.
“Celebro que el Gabinete de Seguridad, que el Ministerio Público esté actuando y que no haya impunidad para nadie, y si esta persona tiene delitos por los que hay que responder, que responda él y todos”, aseveró el diputado, dejando claro que en la actual administración la ley no negocia.
En su intervención, Monreal aprovechó para dar un espaldarazo a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, reconociendo su determinación para combatir las estructuras delictivas de raíz. Sin embargo, ante las especulaciones habituales en la grilla política, el legislador se curó en salud respecto a cualquier vínculo personal con el detenido.
Con el estilo pragmático que maneja ante los medios, Monreal descartó conocer a “El Limones”, aunque admitió la posibilidad de que exista algún registro gráfico fortuito, dada la naturaleza pública de su agenda. “Qué bueno que la presidenta Claudia Sheinbaum está a fondo en la lucha contra la impunidad… yo no lo conozco, pero a lo mejor hasta una fotografía sale también conmigo”, comentó, aludiendo a los cientos de selfies que concede diariamente a simpatizantes en aeropuertos y giras de trabajo, sin solicitar credenciales a quien se le acerca.
